Santiago, RD
En los últimos meses, al menos ocho agentes de Vigilancia y Tratamiento Penitenciario (VTP) han sido llevados ante la justicia debido a faltas graves y muy graves en el desempeño de sus funciones.
Los incidentes más recientes tuvieron lugar en Puerto Plata, donde un juez de la Oficina de Atención Permanente dictó tres meses de prisión preventiva contra cinco agentes penitenciarios. Estos agentes, entre los que se encuentran supervisores y encargados de seguridad, enfrentan acusaciones por violar varios artículos del Código Penal Dominicano en perjuicio de Jean Luis Almonte Núñez, quien supuestamente recibió una severa golpiza mientras estuvo recluido en la penitenciaría local.
Además, en La Vega, otro juez dictó un año de prisión preventiva contra Delvis Johnson Minalla, supervisor del Centro Penitenciario El Pinito. Minalla está acusado, junto con otro individuo y un prófugo, de dar muerte a Alejandro Vidal, quien fue envenenado. También se investiga a otros agentes penitenciarios por la muerte de Gregorio Matos Carrasco, acusado de asesinar a su pareja Casandra Carmelina Castillo, de 2 años, mientras esta lo visitaba en la Fortaleza La Concepción de La Vega.
Estos casos ponen de relieve la gravedad de los problemas en las cárceles dominicanas, donde se han encontrado drogas, armas caseras y teléfonos móviles durante requisas recientes. A pesar de contar con un cuerpo especializado y formado para tratar con reclusos, la presencia de estos elementos ilegales en los centros de corrección indica una falta de eficacia en la supervisión y el control de las instalaciones.
Miembros del sistema judicial han expresado la necesidad de investigar más a fondo para determinar cómo es posible que, a pesar de los esfuerzos por mantener el orden, sigan ocurriendo irregularidades en los recintos penitenciarios. La falta de acción contra los agentes penitenciarios involucrados en estos hallazgos sugiere una falta de responsabilidad que socava los esfuerzos por mejorar las condiciones en las cárceles del país.