Santo Domingo RD
El triste y solemne acto de despedida al segundo teniente Fernando Pérez Berigüete, caído en el cumplimiento de su deber, estuvo marcado por todos los honores militares que le fueron otorgados como un servidor de la Patria.
El Himno Nacional y el «toque de silencio» de la trompeta del Ejército resonaron en el cementerio Cristo Salvador, en Santo Domingo Este, mientras los oficiales entregaban la bandera dominicana a su familia en reconocimiento a sus 25 años de servicio a la protección de la soberanía dominicana.
La esposa del teniente, María Estela de Pérez, sostenía en sus brazos a sus tres hijos mientras era recibida por un pelotón de más de 30 conscriptos del cuerpo castrense. Las melodías de la trompeta, con un sonido deprimente, marcaron el inicio de un doloroso acto en el que los llantos de todos los presentes reflejaban el profundo dolor por la pérdida de un ser querido.
La madre del teniente, Onelia Beriguete, compartió el dolor de la pérdida y relató los detalles del trágico suceso, mientras que los parientes y amigos acompañaron a la familia en este momento de duelo.
Los hijos y la concubina del teniente, a quienes él amaba profundamente, se despidieron entre ramos de flores y lamentos en los estrechos pasillos del camposanto. Las oraciones y los gestos de despedida se sucedieron, mientras los suboficiales del Ejército rendían los honores finales con tres disparos al cielo.
En medio del clamor por justicia y el dolor que embarga a la familia y a todos los presentes, la Policía Nacional continúa con las investigaciones para identificar a los culpables de este trágico suceso ocurrido durante un supuesto asalto.
Que la memoria del segundo teniente Fernando Pérez Berigüete perdure como la de un valiente servidor de la Patria, y que su sacrificio no sea en vano en la lucha por la justicia y la seguridad de todos los dominicanos.