El Salvador
El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, anunció el martes que su gobierno va a «arrasar» con los pandilleros y que no saldrán jamás de prisión, en respuesta al asesinato de un agente de la Policía Nacional Civil (PNC).
A través de Twitter, Bukele declaró: «Que sepan todas las ONG de ‘derechos humanos’, que vamos a arrasar con estos malditos asesinos y sus colaboradores, los meteremos en prisión y no saldrán jamás».
Esta declaración se produjo luego de que la PNC informara sobre el asesinato de un agente en el departamento de Chalatenango, quien fue atacado por pandilleros mientras patrullaba con otros policías.
Bukele continuó expresando su determinación y desprecio hacia las críticas de los medios de comunicación y los actores internacionales: «No nos importan sus reportajes lastimeros, sus periodistas prepago, sus políticos marionetas, ni su famosa ‘comunidad internacional’, que jamás se preocupó por nuestra gente. Sanaremos nuestro país y eliminaremos esta peste por completo».
El Congreso, de mayoría oficialista, se está preparando para votar la decimocuarta ampliación de un régimen de excepción que suspende garantías constitucionales, como el derecho a la defensa.
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, afirmó en una entrevista televisiva que alrededor de 5,000 personas arrestadas bajo el régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, lo cual representa más del 7% de las detenciones, han sido liberadas.
Villatoro rechazó las acusaciones de varias organizaciones humanitarias que señalan detenciones de personas sin vínculos con las pandillas.
Organizaciones humanitarias del país han registrado al menos 5,082 «víctimas directas» de violaciones a los derechos humanos, principalmente por detenciones arbitrarias, en el contexto del régimen de excepción.
El gobierno enmarca esta medida dentro de su llamada «guerra contra las pandillas», a la cual atribuye la reducción de los homicidios hasta una tasa de 7.8 por cada 100,000 habitantes en 2022, aunque dicho dato es cuestionado por un observatorio de derechos humanos.