nuevas sanciones contra Rusia
En una reunión histórica en Hiroshima, los líderes de las naciones del G7 han anunciado la imposición de nuevas sanciones contra Rusia. Reunidos en el viejo corazón político de Hiroshima, donde cayó la primera bomba nuclear en 1945, los jefes de Estado y de Gobierno han reafirmado su compromiso de hacer frente común contra la guerra de agresión ilegal. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, junto con los líderes de Japón, Reino Unido, Francia, Alemania, Italia y de la Unión Europea, acordaron aplicar estas sanciones con el objetivo de privar a Rusia de tecnología, equipamiento industrial y servicios que sostienen su maquinaria de guerra en Ucrania.
Las sanciones incluirán restricciones a las exportaciones de bienes críticos para Rusia en el campo de batalla, así como medidas contra entidades acusadas de proporcionar material al frente en beneficio de Moscú. Estas acciones se producen en un contexto geopolítico muy inestable, con Rusia amenazando con un ataque táctico nuclear en Ucrania.
Además de abordar la situación en Ucrania, los líderes del G7 también trataron el tema de China, expresando su interés en mantener una cooperación estable y constructiva, pero destacando la necesidad de eliminar riesgos y prácticas desleales. También se hizo un llamado a China para que presione a Rusia y detenga su agresión militar.
En el marco de esta cumbre, los líderes del G7 visitaron el Monumento a la Paz en Hiroshima, depositando ofrendas florales en memoria de las víctimas de la bomba atómica. El anfitrión de la reunión, el primer ministro japonés Fumio Kishida, ha sido un defensor del desarme nuclear y buscó amplificar el mensaje pacifista durante la cumbre.
Se espera que estas sanciones sean un paso importante en la respuesta internacional a las acciones agresivas de Rusia y envíen un mensaje claro de solidaridad por parte de las democracias más ricas del mundo en la defensa de la paz y la estabilidad global.