Santo Domingo Norte RD
Las intensas lluvias del pasado fin de semana desataron la desesperación en el sector Brisa del Este, Sabana Perdida, Santo Domingo Norte, donde el desbordamiento del rÃo La Yuca dejó más de 25 casas sumergidas y a sus habitantes clamando por ayuda.
Los residentes, muchos de los cuales experimentaron este fenómeno por primera vez, se vieron sorprendidos cuando, alrededor de las 10 de la noche del sábado, el agua comenzó a subir de manera incontrolable. Ante la falta de advertencia y preparación, tuvieron que salir corriendo para refugiarse.
Nicole del Rosario, residente afectada, expresó su angustia: «Salà de la casa y ya el agua me daba por la rodilla, nosotros no encontrábamos qué hacer ni cómo salir. Yo asustada, la niña también, nunca habÃamos vivido algo asû.
Más de 400 mililitros de lluvia cayeron en la zona, y el rÃo La Yuca, cuya magnitud de crecimiento no se veÃa en muchos años, arrasó con todo a su paso. Los afectados afirman que ni el alcalde ni ninguna autoridad gubernamental se ha presentado en la zona, catalogándola como un sector olvidado.
«Este es un sector olvidado y mientras tanto, nosotros estamos tratando de sobrevivir arrimados donde amigos, vecinos y familiares que nos ayudan», señaló AnistÃn Medina, residente refugiada en la casa de su suegra.
La pérdida de propiedades es generalizada, y muchos residentes, que viven de trabajos informales, han perdido no solo sus hogares sino también sus pertenencias más esenciales. En algunos casos, la evacuación fue tan repentina que no pudieron salvar documentos importantes, medicamentos, ni siquiera la ropa de sus hijos.
La falta de respuesta de las autoridades ha aumentado la desesperación de los afectados, quienes esperan con urgencia la intervención gubernamental para hacer frente a esta tragedia. En otras partes del paÃs, como en la provincia Duarte, también se reportan daños considerables, evidenciando la magnitud del impacto de las lluvias.
Las autoridades siguen evaluando los daños y buscando soluciones para las comunidades afectadas. La situación actual requiere atención inmediata para proporcionar ayuda a los damnificados y coordinar esfuerzos para prevenir futuros desastres similares.