Santo Domingo RD
La comunidad internacional ha aplaudido el compromiso de Kenia para liderar una fuerza multinacional que ayude a combatir a las pandillas armadas en Haití, que ha estado experimentando una crisis con disturbios, incendios, asesinatos y desplazamientos forzosos de familias. El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó una resolución autorizando el despliegue de esta fuerza con el objetivo de poner fin a la violencia.
Sin embargo, se plantea la pregunta de si Kenia, que aportará 1,000 agentes de policía junto con cientos de soldados de países caribeños, será capaz de lograr la paz frente a miles de miembros de más de 200 pandillas altamente armadas y experimentadas en combates urbanos.
Uno de los desafíos más significativos será penetrar en sectores marginales y empobrecidos donde estas pandillas tienen un fuerte control. Estos grupos operan en zonas estratégicas y cuentan con habilidades para moverse entre una densa población de casi 12 millones de habitantes.
Para Kenia, la primera prueba será cambiar su imagen ante los haitianos y convencerlos de que no habrá abusos. A pesar de su historial en misiones de paz, Kenia también enfrenta críticas por su tratamiento hacia la población civil y grupos en conflictos anteriores.
Kenia ha participado en misiones de paz en más de 40 países y ha contribuido con más de 55,000 tropas y otro personal. Sin embargo, su historial incluye acusaciones de facilitar exportaciones ilícitas y abuso de fuerza en operaciones pasadas.
Haití presenta un desafío único debido al tráfico de armas sofisticadas desde Estados Unidos, lo que contribuye a la anarquía en el país. Las pandillas en Haití demandan rifles de mayor potencia, como los AK47 y AR15, que se venden por precios exorbitantes. Esto representa un desafío significativo para la fuerza de paz liderada por Kenia.
En resumen, la misión pacificadora en Haití liderada por Kenia enfrenta numerosos desafíos, desde la penetración en áreas controladas por pandillas hasta la gestión de armas sofisticadas. Su éxito dependerá en gran medida de su capacidad para ganarse la confianza de la población haitiana y abordar eficazmente la violencia en el país.
Fuente: Listín Diario