Derna, Libia
La ciudad costera de Derna, en Libia, se encuentra en estado de conmoción debido a las devastadoras inundaciones que azotaron la región después de la tormenta Daniel. Las autoridades informan que más de 3,800 personas han perdido la vida, mientras miles siguen desaparecidas o han sido desplazadas.
El panorama en Derna es desolador, con calles llenas de cadáveres a la espera de ser llevados a los cementerios en camionetas. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) reporta que al menos 30,000 residentes de la ciudad, que tenía una población de 100,000 habitantes, se han visto obligados a desplazarse debido a las inundaciones.
Imágenes compartidas en redes sociales muestran un paisaje apocalíptico en Derna, con edificios destruidos, puentes colapsados y deslizamientos de tierra que han dejado a la ciudad parcialmente inaccesible. La falta de energía eléctrica y problemas en las redes de telecomunicaciones han complicado aún más la situación.
Este desastre natural ha afectado gravemente a la región de Cirenaica, en el este de Libia, y se considera el peor desde el gran terremoto que sacudió la ciudad de Al Marj en 1963. La tormenta Daniel golpeó la costa oriental de Libia, afectando ciudades como Bengasi, Jabal al Akhdar, Shahat, Al Marj, Al Bayda, Susa y, especialmente, Derna.
La cifra de muertos varía según las fuentes. El gobierno instalado en el este de Libia, encabezado por el teniente Tarek al Kharraz, informa que hasta el momento se han contabilizado 3,840 muertes en Derna, incluyendo al menos 400 extranjeros, principalmente sudaneses y egipcios. Sin embargo, las autoridades locales hablan de una cantidad aún mayor de desaparecidos y temen que el saldo final sea más devastador.
Las organizaciones internacionales, incluyendo la Comisión Europea, el Reino Unido y la ONU, están enviando ayuda humanitaria a Derna para abordar esta crisis. Se advierte sobre el riesgo de artefactos explosivos sin detonar que las inundaciones han desplazado, lo que representa una amenaza adicional para los sobrevivientes y las operaciones de ayuda humanitaria en la zona.