La FLORIDA
El huracán Idalia, que azotó las costas de Florida, ha dejado un rastro de destrucción en su paso, cobrándose la vida de al menos dos personas, dejando a más de 280,000 personas sin electricidad y provocando la cancelación de alrededor de mil vuelos en los Estados Unidos.
En el condado de Pasco, en la madrugada del miércoles, un trágico accidente tuvo lugar cuando un hombre conducía un Ford Ranger y fue embestido contra un árbol por la fuerza del huracán. Esta fue la primera víctima mortal que se cobró el ciclón, según informó la Patrulla de Carreteras de Florida. En Alachua, otro hombre de 59 años perdió la vida en un accidente en condiciones extremadamente lluviosas, lo que ha llevado a las autoridades del condado a emitir advertencias preventivas sobre las condiciones peligrosas en la carretera.
Las inundaciones también han sido una consecuencia significativa del huracán. La Oficina del Sheriff de Pasco informó que ha ayudado a evacuar a más de 60 personas de casas inundadas en el área de Hudson. Los agentes continúan patrullando la región afectada por el huracán, enfrentándose a carreteras inundadas, árboles caídos y líneas eléctricas derribadas.
A pesar de que el huracán Idalia se debilitó a categoría 1 después de tocar tierra en las costas estadounidenses, su impacto ha sido significativo. Las poblaciones costeras de Cedar Key y Steinhatchee, cercanas al punto de impacto, sufrieron graves inundaciones costeras debido a las marejadas, que alcanzaron alturas de 12 a 16 pies según el Centro Nacional de Huracanes (CNH).
La falta de electricidad ha afectado a una gran cantidad de personas, con alrededor de 280,000 habitantes de la zona sin suministro eléctrico. Además, el sector de la aviación también ha enfrentado complicaciones, ya que se han cancelado alrededor de mil vuelos en los Estados Unidos, según los datos proporcionados por el servicio de monitoreo FlightAware.
En resumen, el huracán Idalia ha dejado una triste estela de dos víctimas mortales, una extensa interrupción del suministro eléctrico y una serie de desafíos logísticos en el transporte aéreo. Las comunidades afectadas se encuentran lidiando con los estragos causados por este fenómeno climático y trabajan en la recuperación de sus vidas y propiedades.