Puerto Príncipe, Haití
Los policías kenianos comenzaron a patrullar este miércoles en vehículos blindados por el centro de Puerto Príncipe, un día después de la llegada de 200 efectivos del país africano como parte de una misión multinacional destinada a restablecer la seguridad en Haití. Un responsable de la policía local, que prefirió mantenerse en el anonimato, indicó que los blindados recorrieron los alrededores del Palacio Nacional y otras áreas de la capital con agentes de Kenia y tropas de élite de la policía haitiana a bordo, sin proporcionar detalles sobre el objetivo de la operación.
Al paso de los vehículos se escucharon varias detonaciones, según constató un periodista de la AFP, aunque no se pudo confirmar si provenían de la policía o de las bandas armadas que controlan el 80% de la capital.
La creciente violencia de estas pandillas llevó a la ONU a organizar una fuerza internacional liderada por Kenia para asistir a las autoridades haitianas en la restauración del orden. Kenia ha enviado 400 agentes a Haití, 200 el 25 de junio y 200 más el martes, y ha prometido enviar otros 600 en las próximas semanas. La misión, con una duración inicial de un año, contará con un total de 2,500 efectivos, con la participación de policías de países como Bangladés, Benín, Chad, Bahamas y Barbados.
Estados Unidos ha descartado enviar personal, aunque contribuye al despliegue de esta fuerza con fondos y ayuda logística.
Haití ha sufrido durante mucho tiempo el azote de grupos armados, pero la situación se ha deteriorado desde finales de febrero, cuando varias pandillas se aliaron para atacar lugares estratégicos de la capital, como comisarías, cárceles y el aeropuerto, en un desafío al entonces primer ministro Ariel Henry. El controvertido dirigente terminó renunciando y un consejo presidencial de transición asumió el poder con la complicada tarea de restablecer la seguridad en el país y frenar la grave crisis humanitaria provocada por la violencia.
Para facilitar las operaciones policiales contra las bandas armadas, el nuevo gobierno se dispone a declarar el estado de emergencia en el departamento del Oeste, que incluye Puerto Príncipe, y en el de Artibonite, al norte de la capital, según indicó una fuente del ejecutivo a la AFP. Estas dos áreas están entre las más afectadas por las acciones de las pandillas haitianas, acusadas de asesinatos, violaciones, saqueos y secuestros.