Oakland, EE.UU.

Los Atléticos de Oakland cerraron un capítulo de su historia al disputar su último partido en el Coliseum, donde derrotaron 3-2 a los Rangers de Texas este jueves, poniendo fin a más de medio siglo en la ciudad. El equipo, que llegó a Oakland en 1968, deja un legado de grandes éxitos, aunque su salida marca el fin de una era que también está teñida de fracaso.

El equipo se mudará a Sacramento a partir de la próxima temporada, donde jugarán hasta 2028, cuando se espera que su nuevo hogar sea Las Vegas. Este movimiento no es el primero en la historia de los Atléticos, que previamente jugaron en Filadelfia (1901-1954) y Kansas City (1955-1967). Sin embargo, su propietario, John Fisher, destacó que Oakland fue su mejor hogar.

“Oakland ha sido el hogar de la mejor era en los más de 123 años de historia de la franquicia”, afirmó Fisher. Durante su tiempo en Oakland, los Atléticos lograron seis campeonatos de liga, 17 títulos divisionales y cuatro títulos de la Serie Mundial (1972, 1973, 1974 y 1989). Figuras históricas como Reggie Jackson, Rickey Henderson y Dennis Eckersley ayudaron a cimentar su éxito en el terreno.

El impacto económico y la controversia

Pese al discurso sentimental de Fisher, la verdadera razón detrás de la mudanza parece ser el negocio. Oakland y el equipo no pudieron llegar a un acuerdo para la construcción de un nuevo estadio en la terminal Howard, tras haber explorado cinco posibles ubicaciones en la bahía.

La decisión de Fisher de trasladar el equipo a Las Vegas ha sido criticada, especialmente por su falta de inversión en mantener un equipo competitivo. Esta falta de compromiso provocó que la afición disminuyera considerablemente, con un promedio de asistencia de apenas 10,000 fanáticos por partido en un estadio con capacidad para más de 46,000 personas.

El exlanzador de los Atléticos Trevor May fue una de las voces más críticas hacia Fisher, instándole a vender el equipo a alguien dispuesto a invertir en el éxito de la franquicia. “Vende el equipo, amigo. Dejemos que alguien que realmente se enorgullezca de lo que posee, sea dueño de algo”, declaró May en un video en octubre pasado, antes de que la MLB aprobara la mudanza a Las Vegas.

El declive de los Atléticos y el impacto en Oakland

Los Atléticos han enfrentado una sequía de éxitos en los últimos años, con cuatro temporadas consecutivas sin alcanzar la postemporada. La gerencia del equipo ha optado por no otorgar grandes contratos y ha dejado ir a jugadores clave, debilitando el rendimiento en el campo.

La partida de los Atléticos también golpea el panorama deportivo de Oakland, que ya perdió a los Warriors de Golden State (NBA) y a los Raiders (NFL). Con la salida de los Atléticos, Oakland se queda sin equipos profesionales en las principales ligas deportivas de Estados Unidos, lo que marca un triste final para una ciudad que fue hogar de grandes campeones.

Por redaccion

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