París, Francia.
Un nuevo estudio publicado en The Lancet advierte que la resistencia a los antibióticos podría provocar directamente la muerte de más de 39 millones de personas en los próximos 25 años. Este fenómeno, que ya es considerado uno de los mayores desafíos sanitarios globales, se está agravando rápidamente, con bacterias y otros patógenos que desarrollan mutaciones para resistir los tratamientos antimicrobianos.
El estudio, que analiza datos de 520 millones de personas en 204 países, revela que entre 1990 y 2021, más de un millón de personas murieron anualmente debido a infecciones resistentes a los antibióticos. La investigación cubre 22 agentes patógenos, 84 combinaciones entre estos y los tratamientos, y 11 síndromes infecciosos, afectando a personas de todas las edades.
Si bien en las últimas tres décadas las muertes de niños menores de cinco años a causa de la resistencia a los antibióticos se redujeron en un 50%, las muertes de personas mayores de 70 años aumentaron más de un 80%. Este incremento se debe al envejecimiento de la población y su mayor vulnerabilidad a infecciones.
El estafilococo dorado es uno de los agentes patógenos cuyas muertes relacionadas han crecido más a nivel mundial, según el estudio. Para 2050, se estima que la resistencia a los antibióticos causará alrededor de 1,9 millones de muertes anuales, un 67% más que en 2021.
El estudio también plantea que con mejores tratamientos de infecciones y un acceso más equitativo a los antibióticos, se podrían evitar hasta 92 millones de muertes entre 2025 y 2050, especialmente en regiones como el sudeste asiático y África subsahariana.
Los científicos subrayan la urgencia de reforzar los esfuerzos para controlar este creciente problema de salud pública.