Nairobi, Kenia
El presidente de Kenia, William Ruto, destituyó el jueves a casi todos los ministros de su gabinete en un esfuerzo por formar un nuevo gobierno más austero y eficiente. Esta medida se produce tras semanas de protestas por los altos impuestos y la mala administración.
En un discurso televisado, Ruto también destituyó al procurador general, indicando que los ministerios serán dirigidos por sus secretarios permanentes hasta nuevo aviso. El presidente afirmó haber tomado esta decisión tras escuchar al pueblo y que formaría un gobierno más amplio después de realizar consultas.
Kenia ha experimentado tres semanas de descontento, incluyendo la toma del parlamento el 25 de junio por manifestantes en protesta contra un proyecto de ley financiera que incrementaría los impuestos. Más de 30 personas murieron en estas manifestaciones, que se han convertido en llamados a la renuncia del presidente.
Ruto explicó que las destituciones se dieron después de “una evaluación holística del desempeño” del gabinete, y que el nuevo gobierno le ayudará a “acelerar y apresurar la necesaria, urgente e irreversible aplicación de programas radicales” para enfrentar la deuda, aumentar los recursos locales, ampliar las oportunidades de trabajo, eliminar el desperdicio y combatir la corrupción.
El presidente de Kenia nombró 21 ministros del gabinete tras su elección en 2022, y ha sido criticado por seleccionar a cómplices políticos en lugar de tecnócratas para dirigir los ministerios. Además, varios ministerios, entre ellos los de agricultura y salud, han estado involucrados en escándalos de corrupción.
En respuesta a las protestas, Ruto se disculpó por la “arrogancia y la muestra de opulencia” de sus legisladores y ministros, anunciando medidas de austeridad que incluyen la disolución de 47 corporaciones estatales con funciones duplicadas para ahorrar dinero, así como el retiro de la financiación a la oficina de la primera dama, entre otras.
El analista y comentarista Herman Manyora calificó la destitución del gabinete como “una acción audaz” necesaria para calmar el descontento en el país. Esta es la primera vez que un presidente en funciones destituye a ministros del gabinete según la nueva constitución, un acto que no se veía desde 2005, cuando el entonces presidente Mwai Kibaki destituyó a sus ministros tras un referendo fallido.