Tropas en Haití
Estados Unidos ha solicitado un despliegue rápido de la fuerza internacional liderada por Kenia en Haití tras el asesinato de tres misioneros estadounidenses en un ataque de pandillas criminales. El ataque tuvo lugar en un orfanato en Lison 49, Plaine, al norte de Puerto Príncipe, una zona controlada por bandas armadas desde hace varios meses.
El expolicía haitiano Jimmy Cherisier alias Barbecue organiza protestas contra la fuerza multinacional que llegará a Haití. Archivo.
Un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos expresó la urgencia de la situación de seguridad en Haití, destacando que el presidente Joe Biden ha asegurado al presidente de Kenia su apoyo para un despliegue urgente de la fuerza internacional en Haití.
Los misioneros asesinados fueron identificados como Natalie y Davy Lloyd, hija y yerno del legislador de Misuri, Ben Baker. La organización Misiones en Haití confirmó que los tres misioneros fueron atacados por una banda armada mientras trabajaban en un orfanato.
Ben Baker, profundamente afectado, expresó su dolor a través de redes sociales, describiendo la pérdida como un dolor indescriptible y pidiendo oraciones por su familia y la familia Lloyd.
El expresidente Donald Trump también compartió la noticia en su red social Truth Social, condenando el ataque y demandando justicia. En marzo, el Departamento de Estado de EE.UU. ya había emitido un aviso de viaje instando a los estadounidenses a evitar Haití debido a las condiciones de seguridad impredecibles y peligrosas.
Haití enfrenta una grave crisis de violencia con bandas armadas controlando grandes áreas del país, incluyendo la capital, Puerto Príncipe. La situación se ha deteriorado significativamente desde febrero, con matanzas, violaciones y secuestros siendo frecuentes.
El Gobierno interino de Haití ha extendido el toque de queda y el estado de emergencia en un esfuerzo por controlar la violencia y restaurar el orden. La misión multinacional liderada por Kenia se espera que llegue pronto para ayudar a frenar la inseguridad.
El despliegue de la fuerza internacional es visto como un paso crucial para abordar la crisis de seguridad en Haití. La comunidad internacional, liderada por Estados Unidos y Kenia, busca estabilizar la situación y proteger a los ciudadanos y trabajadores humanitarios en el país. La colaboración y el apoyo internacionales serán esenciales para enfrentar los desafíos y restaurar la paz en Haití.