Puerto Príncipe, Haití
El intento de establecer un gobierno provisional en Haití se ve obstaculizado ya que algunos partidos políticos rechazan el plan de crear un consejo presidencial para administrar la transición. La propuesta contemplaba la formación de un panel que elegiría un primer ministro interino y un consejo de ministros con el fin de abordar la crisis en el país, especialmente la creciente violencia de pandillas que ha paralizado la vida cotidiana.
Moïse Jean-Charles, exsenador y candidato presidencial, junto con el exlíder rebelde Guy Philippe, anunciaron que no participarán en este plan de transición. Philippe, quien lideró una revuelta en 2004, declaró que ningún haitiano debería aceptar una propuesta de la comunidad internacional y que son los haitianos quienes deben decidir quién gobernará el país.
Otros políticos influyentes, como el excoronel Himmler Rébu, presidente de la Gran Reunión para la Evolución de Haití, también se han negado a participar en el consejo propuesto. En cambio, su partido prefiere que un juez de la Corte Suprema asuma el poder, argumentando que la propuesta actual ignora las responsabilidades asignadas a las diferentes instituciones.
La Caricom, que había propuesto la creación del consejo de transición, aún no ha respondido a las objeciones de estos políticos haitianos. Esta propuesta fue anunciada tras una reunión de emergencia de mandatarios caribeños, el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, y otros actores internacionales preocupados por la situación en Haití.
Además, Kenia ha confirmado que liderará una misión multinacional de seguridad en Haití una vez que se establezca un nuevo liderazgo interino en el país. A pesar de los desafíos logísticos y de seguridad, Estados Unidos y otros países han expresado su apoyo a esta iniciativa, destacando la importancia de un plan liderado por Haití y respaldado por la comunidad internacional para abordar la crisis en el país caribeño.
La implementación del consejo de transición se acordó en una reunión de la Caricom en Jamaica y cuenta con el apoyo de socios internacionales, incluido Estados Unidos. Desde el asesinato del presidente Jovenel Moïse en julio de 2021, Haití ha estado sin un líder estable, y la situación se ha visto agravada por la creciente violencia de pandillas y la inestabilidad política.