Santo Domingo RD
Solo siete jugadores dominicanos han conseguido mantener un promedio de bateo superior a .300 a lo largo de sus carreras en las Grandes Ligas, destacándose entre más de 400 compatriotas que han pisado los diamantes de las Grandes Ligas durante los últimos 68 años.
Vladimir Guerrero, Manny Ramírez, Mateo Alou, Manuel Mota, Moisés Alou, Robinson Canó y Pedro Guerrero son los únicos dominicanos que pueden presumir de este logro, lo que los coloca en una categoría élite en la historia del béisbol.
Guerrero, conocido como el tercer inmortal dominicano, mantuvo un impresionante promedio de .317 a lo largo de su carrera. Durante sus 17 temporadas en las Grandes Ligas, destacó especialmente contra ciertos lanzadores, como Kevin Millwood, Steve Traschsel, y Tom Glavine, contra quienes tuvo promedios de bateo superiores a .400.
Por otro lado, Manny Ramírez, uno de los mejores bateadores derechos de la historia del juego, también dejó su huella enfrentándose a lanzadores como Joe Blangton, Sidney Ponson, y CC Sabathia, contra quienes tuvo promedios de bateo por encima de .500.
Mateo Alou, por su parte, se destacó contra lanzadores de renombre como Jim Bunning, Tom Seaver y Juan Marichal, mientras que Manuel Mota demostró su habilidad contra lanzadores como Steve Carlton y Chris Short.
Moisés Alou, Robinson Canó y Pedro Guerrero también exhibieron su dominio en el plato, castigando a numerosos lanzadores a lo largo de sus carreras en las Grandes Ligas.
Sin embargo, también enfrentaron desafíos, encontrándose con lanzadores que les presentaron dificultades. A pesar de sus impresionantes promedios de bateo, tuvieron que enfrentarse a algunos lanzadores que lograron contener su poder ofensivo.
Estos datos ilustran la habilidad y la destreza de estos destacados jugadores dominicanos en las Grandes Ligas, así como los desafíos que enfrentaron en su camino hacia el éxito en el béisbol profesional.