Santo Domingo RD
Karl-Anthony Towns ya ha logrado hitos notables en su carrera de baloncesto. Con 60 puntos anotados en un solo partido de la NBA, un campeonato de tres puntos, tres selecciones All-Star y el prestigioso premio al Novato del Año, es una fuerza innegable en la cancha. Como la primera selección general en el draft de talentos, cuenta con un contrato cercano a los 60 millones de dólares por una sola temporada.
Ahora, mientras el equipo nacional de baloncesto de la República Dominicana se prepara para la próxima Copa Mundial que comienza este viernes, Towns tiene la oportunidad de grabar su nombre en la historia de una manera sin precedentes. Esta oportunidad podría elevarlo más allá de todos sus logros anteriores como atleta profesional en el país, liderando a un equipo dominicano en los Juegos Olímpicos por primera vez.
El camino por delante es desalentador. Para lograr esto, el equipo dominicano debe ubicarse entre los dos mejores equipos de las Américas, de las 32 naciones participantes en el torneo de tres naciones celebrado en Filipinas, Japón e Indonesia.
Frente a competidores formidables como Canadá y Estados Unidos, ambos equipos repletos de talentos de la NBA, junto con otros fuertes contendientes como Brasil, Venezuela, Puerto Rico y México, el viaje del equipo dominicano no es tarea fácil.
En esta búsqueda, Karl-Anthony Towns, el hijo de Karl-Anthony Towns Sr. y la difunta Jacqueline Cruz, cumpliría una promesa que hizo hace varios años, cuando aún no era la estrella que es hoy en la liga de baloncesto más importante del mundo.
«Sueño con que lleguemos a los Juegos Olímpicos y ganemos una medalla», fueron las palabras exactas de Towns al periodista Yancen Pujols durante una entrevista en el programa «Círculo de Grandes Ligas» hace unos ocho años. Towns es uno de los ocho jugadores que debutan con la camiseta del equipo nacional durante este torneo mundial.
Antes de su viaje a la NBA, Towns participó en el Centrobasket Sub-17 en 2011, el Centrobasket for Seniors en 2012, el torneo Preolímpico ese mismo año y el evento Pre-World Cup al año siguiente.
Reflexionando sobre sus experiencias anteriores, Towns mencionó: «Tuve una gran experiencia, me ayudó a moldear mi carácter, aprender y comprender cómo funcionan los líderes». Mencionó específicamente a jugadores como Al Horford, Francisco García y Jack Michael Martínez como modelos a seguir.
Towns agregó: «Los fanáticos en la República Dominicana también merecen la oportunidad de tener el mejor equipo posible, de ser parte de los Juegos Olímpicos y una Copa del Mundo».
El equipo dominicano ya llegó a Filipinas, donde se enfrentará a Egipto en su último partido amistoso el martes. Su debut en la Copa del Mundo está programado para el viernes a las 8:00 AM (hora dominicana) contra la nación anfitriona, Filipinas. El equipo dominicano comparte el Grupo A con Italia y Angola.
El viaje de Karl-Anthony Towns con el equipo de baloncesto dominicano representa más que un evento deportivo. Es un testimonio de la dedicación, los sueños y el potencial de inspirar a una nación. A medida que comienza la cuenta regresiva para la Copa del Mundo, los ojos de la República Dominicana están fijos en la perspectiva de la gloria olímpica, con Towns liderando el camino.