Jimani RD
Las intensas lluvias que azotaron el sur del país durante el pasado fin de semana han generado graves consecuencias, incluyendo inundaciones en pueblos, destrucción de cultivos, viviendas, puentes y calles. Esta situación ha agregado un nuevo desafío a la ya difícil situación socioeconómica que enfrentan las comunidades de las provincias que conforman la Región Enriquillo.
En la provincia de Independencia, las lluvias provocaron daños significativos, con el lamentable fallecimiento de una persona arrastrada por las aguas del río Blanco, que tiene su origen en Haití. Además, la infraestructura vial, puentes y caminos vecinales resultaron afectados. En las provincias de Barahona, Bahoruco y Pedernales, las intensas lluvias también causaron inundaciones en viviendas y daños en la agricultura.
La situación en la Región Enriquillo ha empeorado, añadiendo más dificultades a las comunidades que ya enfrentaban retos socioeconómicos. En la ciudad de Neiba, los arroyos se desbordaron, inundando gran parte de la población, incluyendo la vivienda del alcalde municipal. Además, las lluvias destruyeron recién construidos contenes y dañaron gran parte de la capa asfáltica. En Villa Jaragua, el centro de la localidad sufrió los embates de las lluvias, y en la salida hacia Las Clavellinas, se arrancaron aceras y contenes, además de inundarse casas y bloquearse el tráfico en esta carretera internacional que conecta con Haití.
En la ciudad de Jimaní, cabecera de la provincia de Independencia, el desbordamiento del río Blanco trajo a la memoria de sus residentes el desastre ocurrido hace 19 años en el sector conocido como «La 40». Las fuertes precipitaciones han generado daños en puentes, así como en los tramos carreteros de Jimaní-Distrito Municipal Boca de Cachón-La Descubierta. Además, se han reportado viviendas inundadas, cultivos dañados y afectaciones en las instalaciones de riego.
En la provincia de Barahona, se han registrado pérdidas millonarias para los productores de El Peñón y áreas cercanas. El desbordamiento del canal Trujillo ha devastado más de 5,000 tareas de cultivos como plátanos, guineos, rulos y otros rubros agrícolas. En la comunidad de Las Clavellinas, las lluvias han destruido aceras y contenes recientemente construidos, inundado viviendas y causado interrupciones en el tráfico en la carretera internacional que conecta con Haití. El casco urbano de Tamayo también resultó afectado, con al menos 28 viviendas sufriendo graves daños.
Estas inundaciones repentinas y los daños asociados han generado preocupación debido al riesgo de brotes de enfermedades. Se espera que las autoridades gubernamentales tomen medidas para abordar esta situación y brinden asistencia a las comunidades afectadas.