Santo Domingo RD
El gerente general de Edesur, Milton Morrison, ha reconocido abiertamente la existencia de mafias tanto internas como externas en la empresa de distribución de energía eléctrica. Estas mafias se dedican a extorsionar a los clientes, obstaculizando el servicio y exigiendo sobornos. Morrison ha expresado su determinación en enfrentar esta corrupción y erradicarla por completo.
Según informes, colaboradores de la oficina comercial de Edesur en La Feria han estado informando a las personas que acuden a solicitar un nuevo contrato o una conexión de 220 voltios, que no hay contadores disponibles o que faltan cables. Sin embargo, el gerente de Edesur reveló que la empresa cuenta con 12,000 medidores en su almacén y suficiente cantidad de metros de cables para cubrir la demanda.
Recientemente, Edesur recibió un envío de alrededor de 55,000 metros de cables de los tipos 63 y 82, que son los más utilizados en sus operaciones. A pesar de esto, Morrison reconoce que algunos empleados tienen la intención de estafar a los clientes. Existe una estructura corrupta que opera tanto desde el exterior como desde el interior de la empresa para generar estas situaciones fraudulentas.
El gerente de Edesur afirmó que cuando los clientes sobornan a los brigadistas y les entregan una suma de dinero, misteriosamente el cable necesario para su conexión eléctrica aparece de inmediato. Esto plantea interrogantes sobre si realmente no había disponibilidad de materiales, o si se trata de un mecanismo utilizado por personas malintencionadas. Además, se ha informado que algunos clientes han sido solicitados a pagar hasta 8,000 pesos dominicanos para la instalación de conexiones ilegales por parte de los brigadistas.
Morrison reconoce que combatir estas mafias dentro de las empresas de distribución de electricidad es una tarea constante y desafiante. Desde que asumió el cargo de gerente general de Edesur, ha tomado medidas drásticas para enfrentar esta problemática. Hasta abril de 2023, se han desvinculado a 273 personas, entre colaboradores internos y brigadistas, debido a malas conductas y extorsión a los clientes.
La lucha contra estas mafias dentro del servicio eléctrico representa un desafío constante para Edesur y demuestra la necesidad de implementar medidas más efectivas para prevenir la corrupción y garantizar un servicio transparente y confiable para todos los usuarios.