El venezolano Luis Arráez se ha convertido en uno de los peloteros más destacados en la temporada de Grandes Ligas de béisbol. En el primer mes de la campaña, Arráez lideró la liga en promedio de bateo, bateando para un impresionante .438. En una época en la que los promedios ofensivos están en un histórico descenso y donde los jonrones son los reyes del juego, la habilidad de Arráez para poner la pelota en juego y evitar los swings abanicados es un verdadero tesoro.
Arráez no solo es el líder de imparables en la liga, sino que también es el quinto hombre calificado con mayor promedio de batazos en forma de líneas conectadas detrás de un sólido 29.8 por ciento. De los 32 incogibles que ha conseguido en el primer mes de la temporada, 19 fueron luego de una línea. Además, ha impactado frente a cualquier tipo de envío y ha conducido la pelota en todas las direcciones con el propósito de finalizar aportando hits.
La capacidad de Arráez para poner la pelota en juego y evitar los swings abanicados ha llevado a que solo haya abanicado el 7.1% de los lanzamientos realizados en su contra, mientras que la media de la liga es del 25.9%. Los lanzadores han tomado en serio la tarea de contenerlo, pero no han logrado disminuir el impacto del venezolano con lo mejor de su armería.
Arráez también destaca en defensa, mostrando su movilidad en la intermedia y coleccionando dos carreras salvadas en los primeros 202 episodios de la temporada. En resumen, Luis Arráez es un jugador excepcional que está demostrando su habilidad para batear ante diferentes tipos de envíos y su capacidad para poner la pelota en juego, lo que lo convierte en un peligro constante para los lanzadores rivales.